Se ha hablado mucho de los telescopios y de su gran aporte al conocimiento del universo. Aquí, en la Tierra, otra herramienta hace básicamente lo opuesto y de forma muy silenciosa. Se llama de forma genérica “microscopio”, aunque en realidad existen distintos tipos. Por ejemplo, el Nobel de Química 2017 fue otorgado al desarrollo de la criomicroscopía electrónica, que resuelve el problema de poder observar moléculas biológicas en su entorno…